PADI en Irún
¿Qué es la odontopediatría?
La odontopediatría es la rama de la odontología que se encarga del cuidado bucodental de los más pequeños. En Izaga Dental, comprendemos que las primeras experiencias en el dentista marcan la relación del niño con su salud oral para toda la vida.
Por eso, ofrecemos un entorno tranquilo, amable y adaptado a sus necesidades, fomentando la confianza y la educación en hábitos saludables desde la infancia. Nuestro objetivo es que los niños crezcan con sonrisas sanas y sin miedo al dentista.
En Izaga Dental trabajamos con un enfoque preventivo y educativo. Enseñamos a los niños la importancia de una buena higiene, controlamos el desarrollo dental y tratamos de forma temprana cualquier alteración para evitar problemas futuros.
Además, participamos en el Programa PADI (Programa de Atención Dental Infantil), que garantiza la atención bucodental gratuita y especializada para niños de entre 7 y 15 años.
Tratamientos de odontopediatría
Supervisamos el crecimiento dental y la salud de las encías para detectar a tiempo cualquier problema.
Restauramos piezas afectadas por caries o pequeñas fracturas manteniendo la estructura natural del diente.
Ayudamos a prevenir alteraciones en la mordida derivadas de hábitos como el uso prolongado del chupete o la succión del dedo.
Cuándo debe ir un niño al dentista por primera vez
La recomendación actual es muy sencilla: lo antes posible.
La Sociedad Española de Odontopediatría aconseja realizar la primera revisión al salir el primer diente o alrededor del primer año de vida.
En esta primera consulta valoramos diferentes factores que pueden influir en la salud oral del bebé, como antecedentes prenatales, lactancia y alimentación, hábitos orales, higiene, uso del chupete o del biberón, entre otros. Además, os enseñamos la forma adecuada de limpiar sus dientes, cuándo conviene retirar ciertos hábitos y qué rutinas ayudan a prevenir problemas futuros.
También realizamos una exploración completa de la boca y de las estructuras que la rodean, observamos el desarrollo y crecimiento facial, y determinamos el riesgo de caries del pequeño. Con toda esta información, nuestro equipo establece un plan de revisiones personalizado, adaptado a las necesidades de cada niño.
Porque creemos firmemente que la mejor intervención es la que podemos evitar gracias a la prevención.
Caries en niños
Una consulta muy habitual en la clínica es por qué es necesario tratar las caries en los dientes de leche si, tarde o temprano, van a caer. La respuesta es sencilla: los dientes temporales tienen un papel fundamental en el desarrollo del niño.
Además de su función estética, los dientes de leche permiten masticar correctamente, favorecen una buena pronunciación, intervienen en la deglución y la respiración, y actúan como guías naturales para que los dientes definitivos erupcionen en la posición adecuada. Cuando una caries no se trata y termina infectándose o provoca la pérdida prematura del diente, todas estas funciones pueden verse comprometidas, afectando incluso al crecimiento de los huesos y músculos faciales.
Por este motivo, el cuidado de la caries infantil es tan importante —o incluso más— que en los adultos. Nuestro objetivo es siempre prevenir, y cuando aparece una lesión, detectarla en sus primeras fases, cuando el tratamiento es sencillo, cómodo y sin molestias para el pequeño.
Un signo de alerta muy frecuente es la aparición de una mancha blanca opaca en la superficie del diente. Si la observáis durante el cepillado, es recomendable acudir a revisión cuanto antes para valorar si se trata de una caries inicial.
Ventajas del PADI (odontopediatría)
Evita la aparición de caries y enfermedades bucales antes de que aparezcan los primeros síntomas.
Fomentamos hábitos saludables que acompañarán a los niños durante toda su vida.
Creamos una experiencia positiva en el dentista, generando confianza desde el primer día.
Detectamos de forma temprana problemas dentales o de crecimiento, facilitando tratamientos más sencillos y eficaces.
¿A qué edad debe acudir un niño por primera vez al dentista?
Se recomienda la primera visita al cumplir un año o al aparecer los primeros dientes. A partir de ahí, lo ideal es acudir cada seis meses para prevenir problemas y controlar el desarrollo dental.
¿Qué es el programa PADI y a quién va dirigido?
El Programa de Atención Dental Infantil (PADI) ofrece asistencia dental gratuita en niños de 7 a 15 años. Incluye revisiones, selladores, empastes y tratamientos preventivos realizados por dentistas acreditados.
¿Cómo se prepara a un niño para su visita al dentista?
Lo mejor es explicarle la visita con naturalidad y sin transmitir miedo. En Izaga Dental usamos un lenguaje sencillo, mostramos los instrumentos de forma lúdica y adaptamos cada cita a la edad del niño.
¿Qué ocurre si mi hijo tiene miedo o ansiedad?
Disponemos de un entorno tranquilo y técnicas de manejo infantil que ayudan a reducir el miedo y crear una experiencia positiva. Nuestro equipo está formado para trabajar con paciencia, empatía y cariño.
¿Con qué frecuencia deben revisarse los dientes de un niño?
Lo habitual es realizar revisiones cada 6 meses, aunque la periodicidad puede variar según el riesgo de caries o la etapa de desarrollo del niño. En niños con más propensión a caries o hábitos como el uso prolongado del chupete, podemos recomendar controles más frecuentes.
¿Son necesarios los selladores dentales en los niños?
Los selladores de fosas y fisuras son una medida preventiva muy eficaz para evitar caries en muelas definitivas. No duelen, se colocan en una sola visita y ayudan a proteger las zonas donde más fácilmente se acumula la placa. Se recomiendan especialmente en niños con alto riesgo de caries.
¿Es normal que mi hijo rechine los dientes?
El bruxismo infantil es bastante común y suele estar relacionado con el desarrollo, el crecimiento o pequeños desajustes de mordida. Normalmente desaparece con el tiempo, pero conviene revisarlo para evitar desgaste o molestias en la mandíbula.
¿Qué debo hacer si mi hijo se golpea un diente?
Ante un traumatismo, es importante acudir cuanto antes al dentista, incluso si el diente parece intacto. En dientes de leche, valoramos el daño y posibles efectos sobre el diente definitivo; si es un diente permanente, la actuación rápida es fundamental para conservarlo. Mantener la calma y consultar de inmediato es clave.